Buscan a la mascota del Centro de Estudiantes Viales de Trelew

Zumo vivía en la calle y fue adoptado por una familia en Río Negro. Hoy por trabajo viven en Dolavon y lo buscan hace una semana.  

Hacía más de 3 años que Juan Carlos y Vanina conocían a Zumo. Era un perro “callejerito” de Sierra Grande. Le daban de comer y mimaban cada vez que lo encontraban por el barrio. 

En 2018 por cuestiones laborales la familia se traslada a Dolavon teniendo la posibilidad de un espacio para poder adoptarlo. Al ser una comunidad pequeña era perfecta para disfrutar de lindos paseos en espacios abiertos.

Apenas se instalaron en el campamento de Vialidad Nacional volvieron a Río Negro a buscar a Zumo. Ese día lo encontraron con un ojo lastimado y lo llevaron de urgencia al servicio de veterinario. Pero “tristemente” no pudieron salvar su visión. 

Hoy el labrador color dorado está castrado y vacunado y posee un peso saludable. Además disfruta pasear en auto, ama embarrarse, jugar en el agua y dormir en su “amado” colchón de cuna con sus juguetes de tela y silicona. 

“Es nuestro bebe grandote” resalta Vanina a El Valle Online quién además transitó un difícil problema de Salud y su mascota fue un importante apoyo terapéutico. “Su nariz rosada y orejas suaves fueron la mejor medicación para mi estado” expresa.

Además desde que Zumo vive en El Valle es amigo de los chicos del frigorífico de Dolavon. En este lugar los trabajadores siempre le convidan huesos. 

También se convirtió en la mascota del Centro de Estudiantes Viales de Trelew. Fue luego de su participación en la campaña para que no cierren escuelas viales en Argentina. 

Búsqueda 

La familia busca a Zumo desde el 10 de mayo. “Tiene aproximadamente 7 u 8 añitos, una discapacidad visual y la virtud de ser el mejor perro del mundo” señalan en los anuncios publicados en los espacios de mascotas perdidas y en mercados de trueque. 

La búsqueda se compartió en Dolavon, Gaiman, Trelew, Rawson, Puerto Madryn, Playa Unión y hasta tuvo repercusión en Las Plumas. 

En este marco la familia expresó su agradecimiento a la comunidad de Dolavon porque hace poco tiempo que viven en la localidad “y hay muchas personas que están colaborando con su búsqueda”. 

“Zumo vino del planeta de los bonitos a enseñarnos la lealtad y dulzura qué jamás vimos y lo extrañamos. No nos entra una gota más de dolor en pensar dónde, cómo y con quien estará” se lamentan Juan Carlos y Vanina, y añaden: “Siempre decimos que nosotros lo adoptamos, pero en realidad él fue el que nos rescató”.