Procuradora de Fiscalía aclaró sobre un caso de robo en Dolavon
La Procuradora Fiscal del Ministerio Público Fiscal de Trelew, Silvana Lagarrigue, ha emitido una declaración pública para aclarar informaciones que fueron difundidas por un medio radial local. Se le atribuyó haber negado la investigación de un hecho delictivo denunciado por Gustavo Jones, propietario de un taller mecánico en la localidad de Dolavon.
La funcionaria judicial inició su aclaración exponiendo los hechos como sucedieron. Durante un turno fiscal, fue informada por personal de la Comisaría de Dolavon acerca de una denuncia presentada por Jones, quien manifestó que le habían sustraído dos amoladoras. En una segunda intervención, el denunciante regresó a la comisaría, esta vez acompañado por el ciudadano Suárez, un albañil que había trabajado recientemente en el taller de Jones.
Según la versión de Suárez, había adquirido las herramientas la noche del miércoles, en torno a las 22 horas, a un primo que reside en Trelew. Sin embargo, no pudo proporcionar un domicilio claro, mencionando un número de celular que, tras la verificación policial, resultó ser inexistente. Posteriormente, Suárez decidió vender las herramientas a un tal Ramírez, alegando que la compra le había dado “mala espina” y que Ramírez se había marchado a Neuquén con las herramientas.
Jones, en declaraciones a la radio, afirmó que trajo “todas las pruebas” y que “el propio Suárez confesó que compró sus herramientas”, pero que la Fiscalía no quiso investigar. En este punto, Lagarrigue aclaró que nunca se recibió un pedido formal de allanamiento por parte de la Comisaría de Dolavon, lo cual es necesario para proceder con la autorización judicial para cualquier registro domiciliario, amparado por el artículo 52 de la Constitución Nacional.
Ante este contexto, y cumpliendo con sus deberes, la funcionaria judicial aseguró que decidió no recibir declaración de Suárez, dado que, por sus propios dichos, podría verse involucrado en los hechos bajo investigación, al menos por el delito de encubrimiento, lo que requería la presencia de un abogado defensor. Además, instruyó al subcomisario Flores para que diera intervención a la División de Investigaciones Policiales, con el fin de abrir nuevas líneas investigativas. Esto incluía el relevamiento y análisis de cámaras de seguridad, tanto urbanas como privadas, que pudieran haber captado movimientos relevantes para la investigación, así como la obtención de otros testimonios que pudieran aportar datos útiles.
La decisión de Lagarrigue se basó estrictamente en el respeto al debido proceso y la legalidad de las actuaciones. Un eventual allanamiento o medida basada únicamente en los dichos de una persona que podría ser sindicada como parte del hecho podría acarrear nulidades insalvables, afectando la validez de la investigación.
Lamentó que el denunciante haya malinterpretado la situación, lo que llevó a realizar manifestaciones falsas en al menos dos medios periodísticos. La Procuradora destacó que en todo momento atendió a Jones con respeto y que explicó los motivos técnicos y legales que impedían actuar conforme a su pretensión. Afirmó que la investigación del hecho nunca fue desestimada, sino que continúa su curso conforme a derecho.
Como funcionaria pública del Ministerio Público Fiscal de Trelew, Lagarrigue expresó su orgullo por pertenecer a esta institución. Reconoció la responsabilidad que conlleva su cargo y enfatizó que no puede permitir la difusión de expresiones sin contraste informativo en asuntos que afectan la sensibilidad pública. Esto, según ella, no solo opaca resultados positivos de otros procesos, sino que también daña la imagen de una institución que siempre está del lado de la víctima.
Finalmente, Lagarrigue reafirmó su compromiso con la objetividad y el respeto por el debido proceso, instando a los medios de comunicación a ejercer su función social con responsabilidad ética y verificación de las fuentes, garantizando así una información completa y no parcializada.
